Para seleccionar el generador de oxígeno adecuado para su hospital, el primer paso es determinar la cantidad de oxígeno que necesita y dónde se utilizará. Puede calcular la cantidad total según el número de camas y departamentos. Por ejemplo, cada cama de una sala general suele requerir entre 0,5 y 1 litro de oxígeno por minuto, mientras que los pacientes de la UCI necesitan entre 5 y 10 litros por minuto. El quirófano también debe contar con reservas adicionales de oxígeno para diferentes cirugías. Se recomienda añadir entre un 20 % y un 30 % a la cantidad calculada para evitar un suministro insuficiente en caso de rescate de emergencia, camas adicionales o mantenimiento del equipo. Además, los requisitos de oxígeno varían según el escenario. Las salas generales requieren una pureza superior al 93 % y un flujo estable. La UCI requiere una pureza superior al 95 % y la capacidad de ajustar rápidamente el flujo sin interrumpir el suministro de oxígeno. El departamento de neonatología tiene requisitos aún más estrictos, que exigen una pureza del 99,5 % y un control preciso del flujo. Al elegir, debe seleccionar el generador adecuado según el escenario específico.