Saludo a una madre común y corriente pero grandiosa

 Todavía recuerdo el año pasado, durante el período crítico de una licitación de una empresa, ella trabajó estando enferma, coordinando recursos con voz ronca y finalmente ganó ese proyecto aparentemente imposible. Cuando se trata de trabajo, parece una "Dama de Hierro" siempre enérgica, pero cuando se trata de sus hijos, también expresa ese sentimiento compartido por la mayoría de las mujeres. Pero cada vez que habla de esto, la culpa en sus ojos se transforma en una mirada más decidida. Ella dice que quiere dar ejemplo a sus hijos y ofrecer una mejor plataforma para todos. Quizás sea este compromiso con la carrera profesional y con las responsabilidades familiares lo que nos permite ver la resiliencia y la ternura de las mujeres de esta época, y también nos hace comprender que detrás de cada éxito se esconden dificultades y esfuerzos.